El regate es una habilidad individual, característica de varios deportes de pelota, que consiste en realizar movimientos y amagues con diferentes partes del cuerpo (pies, piernas, cadera, brazos o manos) en posesión del balón, con el fin de eludir a un contrario y evitar la pérdida del mismo.[2] Es conocido también como dribbling (del inglés dribble: babear, gotear, regatear [un balón]),[3] un anglicismo que indica una ejecución rápida, imprevisible e incontrolable para el adversario.[2]
En países hispanohablantes tiene diversas denominacionesː gambetear, llevar, desequilibrar, fintar, burlar, cabrear, driblar, adornar, esquivar, eludir, despistar o afiligranar.[4] El regate está presente, en mayor o menor medida, en todos los estilos de juego. Generalmente, la ejecución del regate provoca la ovación de los espectadores.[5]